El papa Francisco envió al nuncio apostólico en Buenos Aires, monseñor Emil Paul Tscherrig, para facilitar el diálogo entre el oficialismo y la oposición de Venezuela, a fin de que el país bolivariano pueda salir de la crisis política que afronta.

La apertura de una instancia de negociación para superar la crisis política en ese país se conoció hoy minutos antes de que el pontífice recibiera en audiencia privada, no anunciada, al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro.

Monseñor Tscherrig, enviado especial del Papa a Venezuela, anunció en Caracas que el domingo en la Isla Margarita se realizará la primera reunión del "diálogo nacional" entre funcionarios del gobierno chavista y la opositora Mesa de la Unidad Democrática.

"Este proceso tiene como objetivo la superación de las coyunturas económicas, políticas y sociales", sostuvo el enviado papal y nuncio en Buenos Aires.

Durante una conferencia de prensa en la capital venezolana, monseñor Tscherrig aseguró que la mesa de diálogo busca "la creación de un clima de confianza, superación de la discordia y promoción de un mecanismo que garantice la convivencia pacífica".

La Santa Sede informó, por su parte, que la audiencia privada entre Francisco y Maduro "se dio en el marco de la preocupante situación de crisis política, social y económica que el país está atravesando y que repercute pesadamente sobre la vida cotidiana de toda la población".

"El Papa, que tiene en el corazón el bien de todos los venezolanos, deseó continuar ofreciendo su contribución a favor de la institucionalidad del país y de cada paso que contribuya a resolver las cuestiones abiertas y crear mayor confianza entre las partes", subrayó en un comunicado oficial.

Asimismo, consignó que el Papa instó a Maduro a "emprender con coraje el camino del diálogo sincero y constructivo, para aliviar el sufrimiento de la gente, de los pobres en primer lugar, y promover un clima de renovada cohesión social que permita mirar con esperanza al futuro de la nación".(AICA)