Precisó que “la gente, los partidos políticos y los empresarios piden la paz, a lo que se suma el apoyo de toda la comunidad internacional y las Naciones Unidas”. Una voz que “exige a las FARC, al Gobierno y a los de ‘No’ a que lleguen a un acuerdo”.
Señaló por ello las palabras pronunciadas por el presidente Juan Manuel Santos, que “la convocatoria a los diversos sectores del ‘No’, que buscará que estas nuevas conversaciones conduzcan a un acuerdo que cuente con mayor respaldo.
Un esfuerzo que supuso “cuatro años de negociaciones sin salirse de una agenda predeterminada” gracias al cual “se llegó a un acuerdo para dejar las armas e integrarse en la vida civil” dijo el diplomático y recordó que presidente Santos desde el inicio aseguró que los acuerdos serían refrendados para que tuvieran permanencia en el tiempo.
A propósito del voto, señaló que Colombia es eminentemente abstencionista, y que incluso algunos analistas esperaban una participación más baja. Añadió que se sumó el hecho que una propuesta sobre la ley de género hizo que las Iglesias cristianas se movieran hacia el ‘no’, pero también las víctimas estaban muy divididas sobre el tema. Concluyó que el ‘no’ del referéndum no era a la paz y que por lo tanto se buscará un nuevo acuerdo que obtenga el consenso necesario.(ZENIT)