Gracias a Papa Francisco muchos fieles han vuelto a descrubrir el sacramento de la confesión. Lo dice el regente de la Penitenciaría apostólica, mons. Krzysztof Nykiel, en une entrevista con la Radio Vaticana, en ocasión del cuarto Simposio de estudios sobre doctrina y práctica de la penitencia que se llevó a cabo en el Palacio de la Cancillería.


«Han sido muchos los peregrinos que se han acercado al sacramento de la reconciliación en las diferentes Basílicas Papales en la Urbe. Nuestros Penitenciarios menores nos informan con entusiasmo que los muchos peregrinos que todos los miércoles (día de la Audiencia General) o los domingos acuden a la Plaza San Pedro para escuchar las palabras que el Papa pronuncia se acercan con más confianza y sincero espíritu de arrepentimiento al sacramento de la confesión», refirió mons. Nykiel.


«También las Iglesias en los alrededores del Vaticano están llenas de fieles que piden confesarse y que quieren dedicar un poco de tiempo a la oración –prosiguió. Papa Francisco, en sus discursos y en sus apariciones en público, está invitando a no tener miedo de pedir perdón a Dios, porque Él es feliz al darnos Su misericordia. En efecto, al encontrarse con los Penitenciarios menores de la Basílica de Santa María Mayor tras su elección pontificia, el Papa les dijo: “Misericordia, misericordia, misericordia. Ustedes son confesores, así que sean misericordiosos hacia las almas”».


Según el regente de la Penitenciaría, las exhortaciones de Papa Bergoglio a construir una Iglesia que se «muestre al mundo como Madre y maestra de misericordia, como casa de todos, de los más fuertes y de los más débiles, de los pecadores, de los indiferentes, de todos los que se sienten desanimados o extraviados», tienen muchísimas consecuencias muy positivas. «Desde diferentes partes del mundo, en efecto –explicó–, nos llegan informaciones sobre el notable despertar de la gente, de nuestros hermanos que se acercan con mayor confianza y sincero espíritu de arrepentimiento al sacramento de la confesión».