La decisión de retirarle la alimentación fue tomada por los pediatras del Complejo Hospitalario Universitario de Compostela, que rectificaron su negativa de día atrás. Se produjo poco después de que los progenitores se reuniesen con el juez encargado del caso. Según el letrado de los padres, su familia entiende que esta decisión podría ser un «faro que ilumine muchos otros casos».
A la niña se le retiraró la sonda por la que se la alimentaba. El paso consistió en sedarla y mantener una mínima hidratación para que pudiera metabolizar esa sedación. Aunque los médicos aseguraron que el fallecimiento podría incluso más un mes en producirse, se ha producido finalmente este viernes.

(INFO CATÓLICA)