Es lo que se constata por el informe trianual del Guttmacher Institute, lobby en favor del aborto, que revela que en el 2017 hubo en ese país 862.000 abortos, mientras que en el 2014 fueron 926.000 y en el 2011 más de un millón.

En todos los estados americanos, salvo en cinco, la tasa de abortos disminuyó.

Es claro que la causa de esta disminución no es sólo la de una mayor conciencia en favor de la vida en la población de los EE.UU., sino que también influye la reducción de mujeres en edad fértil, menos mujeres embarazadas y un mayor uso de métodos anticonceptivos.

Según el informe, en el 2017 hubo 13,5 abortos por cada 1.000 mujeres entre los 15 y 44 años. Desde 1973 el aborto venía en aumento hasta el pico máximo de 1,6 millones en 1990.

El pro-aborto Instituto Guttmacher se lamenta por las casi 400 leyes estatales promulgadas entre 2011 y 2017 que dificultan, restringen o prohíben el aborto. También han disminuído el número de lugares para practicar el aborto a nivel global, aunque si en Texas se cerraron 25 de estos centros, en Nueva York o New Jersey se abrieron 59.