La Iglesia católica nicaragüense, mediadora de un fracasado diálogo entre el gobierno de Daniel Ortega y la oposición, exhortó a retomar el mensaje del papa Francisco de trabajar en favor de la restauración de la concordia y la paz tras la prolongada crisis que vive el país.

Hoy "el Papa nos ha regalado un mensaje que ha titulado, la buena política está al servicio de la paz", el cual "quisiera mis buenos hijos, hermanos, recomendar a todos, de manera muy especial a los que hacen la política en nuestro país", sugirió el arzobispo de Managua, el cardenal Leopoldo Brenes.

"En Nicaragua estamos llamados a ser verdaderos artesanos de paz", con responsabilidad política, afirmó el líder religioso ante miles de feligreses durante una misa campal en favor de la paz en la catedral de Managua.

Brenes, presidente de la Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN), también hizo suyo el deseo expresado la semana pasada por el papa Francisco de que el país supere las "divisiones y las discordias" que vive a raíz de la crisis de las protestas de abril.

El Papa pide que "todos se esfuercen por favorecer la reconciliación y reconstruir juntos el futuro del país", subrayó.

La arquidiócesis de Managua canceló este martes la tradicional procesión de inicio de año por temor a actos de violencia durante la peregrinación, en cuya ruta se observaron desde primeras horas policías antimotines.

Nicaragua fue sacudida el año pasado por una ola de protestas que iniciaron el 18 de abril contra una reforma del seguro social que luego derivó en un movimiento para reclamar la renuncia del presidente Ortega por la represión que ejerció contra los manifestantes.

Los obispos católicos intentaron mediar un diálogo entre el gobierno y la oposición en los meses de mayo y junio, pero su esfuerzo fracasó debido al aumento de la represión.

Según la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), la represión a las protestas dejó 325 muertos y 400 detenidos, mientras que el gobierno reconoce 198 víctimas fatales y 340 manifestantes presos.

El lunes, el presidente anunció que en el 2019 se propone consolidar la estabilidad y la paz para favorecer la recuperación económica, pese a las restricciones crediticias que enfrentará su gobierno a causa de una ley aprobada por Estados Unidos.

La economía nicaragüense, la más frágil de la región, se contrajo el año pasado un 4% debido a la crisis que generaron las protestas antigubernamentales, según proyecciones del Fondo Monetario Internacional (FMI).