El Vaticano suspendió el año pasado el gobierno de la orden Hermanitas de María Madre del Redentor y destituyó a la superiora y la jefa de novicias tras una investigación provocada aparentemente por una disputa en torno a unos hogares para ancianos en el sur de Francia atendidos por las monjas.
Las Hermanitas dijeron que el comisionado designado por el Vaticano desconocía su modo de vida y su espiritualidad.
En una carta del 7 de noviembre, 34 de las 39 monjas dijeron que no tenían “otra opción que renunciar a nuestros votos”. El Vaticano no hizo declaraciones por el momento.