CRISTO HOY
CRISTO HOY

   Sitios Recomendados
        El Vaticano
        Aica
        Rome Reports
        Noticias Vaticanas
  
Maduro amenaza a obispos
18 - 01 - 2018 - IGLESIA - América

El presidente de Venezuela y cabeza visible del bolivarismo pretende abrir una investigación sobre el Arzobispo de Barquisimeto, Antonio López Castillo, y el de de San Felipe, Víctor Hugo Basabe, por presuntos ‘delitos de odio’ en sus homilías. (Fuente: Infovaticana)

Mucho habrá que reformar en esta Iglesia nuestra, porque sus representantes siguen teniendo serios problemas con aquellos regímenes que, por tener a los pobres y desheredados por centro y base, mejor dispuestos deberían estar a su labor. El último en caer en este deplorable malentendido ha sido Nicolás Maduro, presidente de Venezuela y cabeza visible del bolivarismo, quien va a abrir una investigación sobre dos obispos por presuntos ‘delitos de odio’ en sus homilías.

Los probables culpables -no es fácil encontrar un juez que quiera llevarle la contraria a Maduro en Venezuela- son el Arzobispo de Barquisimeto, Antonio López Castillo, y el de de San Felipe, Víctor Hugo Basabe.

En sus homilías, los prelados clamaron por el fin del “hambre y la corrupción”, lo que Maduro leyó del siguiente modo: “Ahora viene un diablo con sotana a llamar a enfrentamientos violentos, a llamar a la guerra civil (…), y le agradezco a la gente del estado Lara que fue la que me alertó de esta cochinada, porque yo la verdad no escucho a esa gente, nosotros no escuchamos a esos bandidos”.

El Papa, dice Castillo, le llamó para expresarle su apoyo. Y no dudamos de que Su Santidad hará pública su enérgica protesta o, mejor, hará valer la cordial relación que mantiene con los regímenes indigenistas de Latinoamérica para lograr un final feliz.

Por su parte, Basabe afirma en una carta en la que responde a las acusaciones que su “único delito es servir a la verdad”, y que su conciencia no tiene nada que reprocharle. “Maduro ha puesto en mi boca palabras que no he pronunciado”, asegura. Cierto, no las ha pronunciado, pero no es novedad que decir la verdad en una dictadura es alta traición, y que todos los tiranos han tenido en los buenos prelados su más incómodos enemigos.

Mario Monta, quien fuera primer vicepresidente de la Conferencia Episcopal Venezolana, saltó también a la palestra para solidarizarse con sus colegas y advertir que el ataque de Maduro es “contra todo el episcopado y contra toda la Iglesia Católica”, así como que, puestos a hablar de ‘delitos de odio’, llamar a dos obispos “diablos con sotana” parece encajar bastante mejor en la definición.

Monta recordó que “hay mucha gente pasando hambre”, y que si señalarlo es una llamada a la violencia según la ley, la ley debe cambiarse.

El problema de la Iglesia con la izquierda no es que los prelados y los fieles tengan algún tipo de obligación doctrinal de “ser de derechas”, sino que por más que la institución pueda querer acercarse a sus grupos, regímenes y partidos, estos se han obstinado sin excepción en perseguir a los creyentes y, con el tiempo, a proscribir la práctica de la religión, salvo que la jerarquía esté dispuesta a renunciar por entero a su misión de ser testigo de la verdad.