Según razona Costello, “si la hermosa y brillante Mary nunca hubiera conocido a George Bailey, nunca habría terminado trabajando en una biblioteca”.
Las “canciones, obras de teatro y ballets pasados ​​de moda” que aparecen en el largometraje, dice Costello, “pueden influir en la manera en que los niños piensan sobre los roles de género”.
Otra feminista que se muestra a favor de destruir la “construcción social” natural para sustituirla por una construcción nacida de la ingeniería social.
Seguro que Costello no se ha parado a pensar en cómo Stewart es el que va dando tumbos por la vida pero es Donna Reed quien es más fuerte que nadie
¿Y qué es lo que propone la periodista en lugar de odiosas películas como el clásico de Frank Capra, que ha gozado del éxito popular durante décadas? Quiere un mundo donde las mujeres sustituyan a los hombres en los papeles principales en todo tipo de películas.
Propone películas como la última de Star Wars, ‘El último Jedi’, en la que una mujer (la protagonista Rey) es “una inteligente y fuerte luchadora por la libertad”.
O ‘Wonder Woman’, cuya superheroína es “compasiva, inteligente y luchadora”.
E incluso el remake de ‘La bella y la bestia’ donde Bella “se niega a conformarse con un hombre que no esté a su altura”.
Otras películas “ejemplares” son ‘Ocean’s 8’ y ‘Los cazafantasmas’. Ambas nuevas versiones pero con protagonistas mujeres, en vez de hombres. ¿El resultado en taquilla? Un estrepitoso fracaso.
Pero he aquí otro análisis diferente de ‘Qué bello es vivir’.
“El héroe más grande es en realidad una heroína, Mary Hatch Bailey, interpretada por Donna Reed“, escribe Paul J. Batura en Fox. “Es la esposa equilibrada e imperturbable de George y la madre de sus cuatro hijos, Janie, Pete, Tommy y Zuzu”.
Seguro que Costello no se ha parado a pensar en cómo Stewart es el que va dando tumbos por la vida pero es su esposa en la pantalla (Reed) quien es más fuerte que nadie. “Mary”, continúa Batura, “tiene muchas de las cualidades que su marido no tiene y lo mantiene a él y a la familia en el camino recto contra viento y marea”.
¿Cuándo entenderán las feministas que la figura materna es la más importante de nuestra sociedad? ¿Por qué despreciar a las personas encargadas de dar vida y coherencia a lo que nos rodea?
