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De anglicanos a católicos por defender el matrimonio
16 - 12 - 2017 - EMERGENCIA ANTROPOLOGICA - Familia

Dos antiguos pastores anglicanos fueron ordenados sacerdotes de la Iglesia Católica luego de que los anglicanos escoceses votaran a favor del matrimonio entre personas del mismo sexo. Se trata de los ex pastores Simon Beveridge y Cameron Macdonald, quienes fueron nombrados diáconos en junio, días después de que la Iglesia Episcopal escocesa votara abrumadoramente para permitir que las parejas del mismo sexo se casaran en su iglesia.(ACI)

Ambos, según indica The Sunday Herald, se unieron al Ordinariato Personal de Nuestra Señora de Walsingham en Inglaterra y Gales, creado en 2011 por el Papa Benedicto XVI para proporcionar un hogar a los antiguos miembros descontentos del clero episcopaliano y anglicano.

El pastor Beveridge fue ordenado sacerdote el 14 de diciembre en Whithorn por el Obispo de Galloway, Mons. William Nolan; mientras que el pastor Macdonald fue ordenado el sábado 16 de diciembre por Mons. Leo Cushley, Arzobispo de St Columba's y Edimburgo.

Este último asistirá al P. Len Black, el sacerdote más antiguo Ordinariato en Escocia, mientras que el P. Beveridge se encargará de edificar una presencia del Ordinariato en Galloway, una de suscinco comunidades en Escocia.

El director del Ordinariato en el Reino Unido es Mons. Keith Newton, un ex obispo de la Iglesia de Inglaterra, que está casado y, por lo tanto, no puede ser obispo de la Iglesia católica.

Si bien tiene la misma autoridad que un obispo, no puede ordenar hombres para el sacerdocio e invita a otros obispos a hacerlo en su nombre.

Mons. Newton dijo estar “encantado con la bienvenida que el Obispo Nolan y el Arzobispo Cushley les mostraron al Ordinariato”.

“Su disposición para ordenar a estos hombres en mi nombre para servir a la Iglesia Católica en el Ordinariato, así como su comprensión de nuestra situación única y sus palabras de aliento han sido muy apreciados y espero con ansias estar con ellos para estas ordenaciones”, sostuvo.

El P. Black, por su parte, sostuvo que este es un momento emocionante para el Ordinariato en Escocia.

“El hecho de que estos dos nuevos sacerdotes trabajen conmigo nos permitirá ofrecer más oportunidades para que las personas experimenten nuestras tradiciones litúrgicas únicas”, concluyó.