Es necesario, subrayó el prelado, que las autoridades restauren el orden y establezcan las bases para que haya confianza en las autoridades.
«Necesitamos restaurar el orden poner bases para que haya autoridades confiables para que los municipios realmente estén al servicio de la gente y no la gente al servicio de los funcionarios (…) Vivimos una situación de violencia, tristemente es algo terrible y de incertidumbre», abundó.
Mons. Suárez Inda afirmó que es inconstitucional que algunas personas –las autodefensas– quieran tomarse la justicia por su propia mano pero también lo es que otras –del rimen organizado– actúen impunemente «destruyendo toda justicia y aplastando la dignidad de las personas, viviendo a través de la extorsión o la amenaza o de secuestros, lo que no es posible conceder», sostuvo.
El arzobispo sostuvo que «la Iglesia continuará denunciando todo aquello que vaya en contra de la dignidad humana, además de que seguirá trabajando para lograr la conversión de quienes se dedican a delinquir».(Infocatólica)