En su homilía dominical en la cual advirtió que se había roto la amistad social y pidió "una conversión moral". Náñez relató que "ayer por la mañana el Santo Padre me llamó por teléfono. Quería interesarse por la situación de Córdoba y expresarnos su cercanía en la oración".
Y, según radio Cadena 3, el Papa "pidió que fuéramos capaces de reencontrarnos para que la paz reinara entre nosotros. Se lo agradecí profundamente y le pedí la bendición, que de corazón nos dejó".
Francisco también abogó por buscar la "esperanza en la reconstrucción de nuestra sociedad".
Por otra parte, Náñez reflexionó a título personal que se vivió la semana pasada "una penosa transgresión a la ordenada y civil convivencia, se han atropellado las personas, sus bienes, proyectos, sus esperanzas, se han roto los vínculos entre los semejantes-vecinos; son desgarradores algunos testimonios: se ha roto la amistad social".
"Por eso es urgente una conversión moral", añadió, y abogó para que ese proceso los "haga reconocer y desaprobar el mal realizado, el mal de no haber prevenido ni previsto estos desórdenes, el mal de haber dejado sin seguridad a la población indefensa, el mal de haber atropellado y saqueado a nuestros semejantes".(Religión Digital)