En el estudio, del que se hace eco el diario español El PAIS, han trabajado una treintena de especialistas de instituciones tan prestigiosas como la Universidad de Columbia, el King’s College de Londres, la Escuela de Salud Pública de Harvard y el Imperial College de Londres.
El especialista del Ministerio de Sanidad de Nueva Zelanda, Martin Tobias explican en un comentario firmado en el estudio: Tener bajo nivel socioeconómico “significa ser incapaz de determinar el propio destino, privado de recursos materiales y con oportunidades limitadas, que determinan tanto el estilo de vida como las posibilidades vitales”.
En El País, se pregunta a experto en el tema que aunque no han participado en el estudio corroban la tesis. Así, explican como hay una gran diferencia de esperanza de vida dentro de una misma ciudad, por ejemplo en Barcelona, Barcelona, Madrid, Glasgow o Baltimore. Estos cambios están muy relacionados con la desigualdad social.
Al leer este informe y el reportaje de El Pais uno no puede sino preguntarse algo obvio: Hay muchas campañas contra el tabaco, el consumo de alcohol, hábitos saludables de alimentación y prevención de enfermedades. ¿Por qué no hay entonces campañas para prevenir la desigualdad social y la pobreza?