Las declaraciones reportadas por Iglesia Viva que han sido publicadas en la web de la CEB precisan: “Queremos decir que la opinión de nosotros como Iglesia y como CEB, no es cuestión de partido de izquierda, derecha o de centro. Es cuestión de saber y recordar que el 21 de febrero de este año el pueblo boliviano habló” cuya palabra “se debería respetar”. Y que “esa es nuestra respuesta respecto a este acontecimiento que es motivo de mucha discusión”, expresó Mons. Aurelio.
Asimismo recordó que: “Es el pueblo el que habló, si el pueblo no tuvo la información no es responsabilidad del pueblo me parece, sino de los actores políticos que son los encargados de manifestar una verdad o decir lo que se debe conocer y es la expresión del pueblo”.
A su vez, Mons. Aurelio, consideró que una nueva postulación del presidente Morales ocasionaría una fractura en el país: “Yo creo que llevará no a una unión pero si a una fractura, ya hay una fracción, ya hay una fractura en nuestro país, y probablemente esto llevará a una fractura que se haga mayor”.