“Europa está a punto de perder su herencia cristiana”, dijo el Cardenal Schönberg en una homilía crucial e inesperada. Esta pérdida, añadió, “no es solo económica sino sobre todo humana y religiosa”, y ya empieza a notarse.

“¿Habrá una conquista de Europa?”, preguntó el arzobispo retóricamente a la multitud congregada en la Catedral de San Esteban. “Muchos musulmanes quieren eso y se dicen: Europa está acabada”.

La homilía, durante una misa en honor al Santo Nombre de María que se instituyó hace 332 años en agradecimiento por la liberación de Viena de los turcos, incluyó un ruego a Dios para que “tenga piedad de Europa, en peligro de perder su herencia cristiana”.

La Batalla de Viena enfrentó a las fuerzas cristianas comandadas por el príncipe polaco Jan Sobieski contra los 90.000 otomanosque asediaban la plaza entre el 11 y el 12 de septiembre de 1683, y supuso el fin de la expansión turca en Europa y el principio de su lenta retirada.

Coincide también la fecha con el décimo aniversario del célebre ‘Discurso de Ratisbona’ de Benedicto XVI, en el que el ahora Papa Emérito señaló las diferencias entre el concepto cristiano de Dios, un Dios que se atiene a la razón, y el que tienen los musulmanes de Alá, que no se sujeta a racionalidad alguna.

El discurso provocó en el mundo musulmán reacciones airadas que parecían confirmar las tesis expresadas, con manifestaciones en varios países islámicos e incluso el asesinato de una monja italiana en Somalia.

(Fuente: Infovaticana)