La noche del sábado al domingo una pareja de jóvenes mantuvo relaciones sexuales públicas en la parada de metro del Liceo de Barcelona. Los jóvenes fueron grabados por los teléfonos de otros usuarios de la red de metro sorprendidos por lo que estaba pasando.

En las imágenes se aprecia como a la pareja no le importa la presencia de público. Algunos incluso pasan por delante, mientras que la mayoría prefieren mantenerse al lado formando una especie de corrillo.

Anna Gabriel, en declaraciones al ‘No ho sé’ de la emisora catalana RAC1, ha sostenido que “no encuentro normal que le demos tanta bola”. “Es el país que tenemos, el morbo y el papel de la iglesia católica”, consideró, además de criticar “la reacción conservadora que lo mezcla todo”. La diputada de la CUP cree que las reacciones negativas se deben a que “son muchos años de Iglesia católica” y ha condenado que “se aprovecha como arma arrojadiza a nivel político”.

“Religar con la concepción del cuerpo, de la intimidad, de la sexualidad… son muchos años de Iglesia Católica y de Santa Inquisición”, añadió, aunque admitió que “es muy probable” que si se encontrara un episodio similar le llamara la atención. “Tenemos muchos deberes por hacer”, sentenció.

Por su parte, la también diputada Mireia Boya ha afirmado en el Oracle de Catalunya Ràdio que “practicar sexo no es pecado”. “Es un lugar público, ha sorprendido pero me parece una tontería que se haya magnificado un hecho que es habitual”, apuntó. “Hay cosas mucho más importantes de las que hablar en este país”, ha reivindicado.

También cuestionó que se quiera multar a los dos jóvenes y preguntó “¿en qué código legal está escrito que está prohibido este tipo de prácticas en el espacio público?”. “El sexo es normal entre los jóvenes, aunque sea en el andén”, ha defendido.(FORUM LIBERTAS)