Desde la demócrata Hillary Clinton hasta el republicano Donald Trump, los políticos estadounidenses han hecho referencia en sus discursos a las palabras y hechos del pontífice.
En esta ocasión ha sido Bernie Sanders, precandidato demócrata a la presidencia de Estados Unidos, quien ha utilizado la figura del líder de los católicos para legitimar su postura política. En una entrevista publicada por The Washington Post, Sander defiende que el Papa Francisco es “socialista”, al ser preguntado por el sacerdote Thomas Rosica, de la Oficina de Prensa del Vaticano.
El principal adversario de Clinton en la carrera por la candidatura demócrata asegura que el “socialismo” de Francisco se muestra en su deseo de aliviar el sufrimiento humano y en su lucha por eliminar las desigualdades, deseos que el propio Sanders ha asegurado que son los suyos.
“Cuando Francisco dice que la riqueza debe ser puesta al servicio de las personas, y no ser considerada un fin en sí, estoy de acuerdo con él”, declara el precandidato demócrata en esta entrevista, en la que ha querido poner de manifiesto aquello que le une con el líder de los católicos.
Sanders también ha hecho suya la crítica del Santo Padre a la avaricia que gobierna el mundo actual y ha asegurado que cuando el pontífice ha planteado la cuestión del “culto al dinero, la idolatría al dinero” estaba realizando una crítica al sistema “hipercapitalista” imperante.
Pero el político demócrata ha ido más allá en su defensa del “socialismo” del Papa y ha sostenido que la defensa de la necesidad de que los más vulnerables sean protegidos por los gobiernos constituye una “crítica directa a la política conservadora”. Sanders augura que esta crítica le costará al Santo Padre sufrir duros ataques.
Estas declaraciones de Sanders se producen pocos días después del cruce de acusaciones entre el ganador en las encuestas republicanas, Donald Trump, y el Papa Francisco. Al ser interrogado por un periodista sobre la política migratoria del precandidato republicano, el pontífice denunció que alguien que creaba muros y no puentes “no era cristiano”.
Una afirmación que provocó el enfado del magnate estadounidense, quien no dudó en arremeter contra el líder de los católicos y denunciar sus palabras: “Que un líder religioso cuestione la fe de una persona es vergonzoso”. Tras el enfado, llegó la advertencia: “El Papa desearía y rezaría por que yo fuera presidente si el Vaticano fuera atacado por el Estado Islámico”. Pasadas unas horas tras el estallido de la tempestad, llegó la calma y finalmente Trump acabó por alabar la “gran labor” que realiza el pontífice.
Ahora Sander ha aprovechado una entrevista para mostrar su sintonía con el Santo Padre, a pesar de ser el primer candidato no cristiano que ha conseguido ganar en las primarias en Iowa y de su firme postura a favor del aborto que le sitúa en las antípodas de la firme defensa de la vida realizada por Francisco.(INFOVATICANA)
