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Centroáfrica: Violencia yihadista antes de la visita del Papa
24 - 11 - 2015 - INTERRELIGIOSO - Musulmanes

Los ataques a las iglesias y a los cristianos por parte de insurgentes musulmanes son cada vez más cruentos y frecuentes en Bangui, ciudad que visitará próximamente el Santo Padre. 

Hace ya más de tres semanas que varias parroquias y lugares donde se encuentran refugiados desplazados han sido atacadas por grupos insurgentes musulmanes. Dos iglesias, San Miguel y San Matías, han sido quemadas, incluyendo los salones parroquiales y la casa parroquial. Tras quemar la iglesia de San Matías el grupo rebelde la ha ocupado, convirtiéndola en un hogar para musulmanes y un cementerio musulmán.
Además de los ataques a estas iglesias, en los barrios cercanos a ellas ya han sido asesinados más de un centenar de vecinos. Actualmente estos barrios se encuentran desiertos y protegidos por la MINUSCA. Debido a situaciones como ésta, los lugares donde se está dando refugio a los desplazados no cesan de recibir nuevas personas.
El arzobispo de Bangui, Dieudonne Nzapalainga, convocó un encuentro de los trabajadores apostólicos de la archidiócesis el pasado día 3. En él pudieron escucharse los testimonios de sacerdotes y religiosos que están sufriendo la difícil situación que atraviesa el país, no exentos de ira y amargura ante los últimos acontecimientos.
De ese encuentro salió un grupo de 10 sacerdotes diocesanos y 5 religiosos y religiosas, entre los que se encuentra un salesiano, que se reunieron con la presidenta del país, Catherine Samba Panza, y con el responsable de la MINUSCA para intercambiar opiniones sobre la realidad del país.
Pocos días después de esta reunión corrió el rumor de que el barrio de Damala y el centro Don Bosco serían atacados durante la noche, por lo que el barrio permanece desierto y algunos refugiados han abandonado el centro. El padre Alphonse, ecónomo de la comunidad, fue objeto de una emboscada al ir al mercado en busca de suministros hace una semana. Afortunadamente pudo dar marcha atrás cuando las balas comenzaban a desfilar frente a él.
A las puertas del centro salesiano se encuentra una presencia de la FACA, las Fuerzas Armadas de África Central, cuya misión es proteger el vecindario. Sin embargo, por la noche ellos abandonan sus puestos, ya que no están preparados para hacer frente a los grupos rebeldes. “Mientras nosotros dormimos pensando que ellos nos están protegiendo, tanto a nosotros como a los refugiados, ciertamente no nos protege nadie más que Dios. Nosotros, y más de 10.000 desplazados estamos abandonados a nuestra suerte”.
El pasado día 12 algunos de los desplazados de San Miguel salieron en busca de algo de comida. Ellos fueron asesinados fríamente a manos de los integristas musulmanes delante de las fuerzas de la MINUSCA. El párroco de San Miguel denunció estos hechos por la radio… “Éste es nuestro día a día en Bangui, sin embargo tenemos esperanza en que la visita del Papa pueda calmar la situación del país”.
(Fuente: Infovaticana)