CRISTO HOY
CRISTO HOY

   Sitios Recomendados
        El Vaticano
        Aica
        Rome Reports
        Noticias Vaticanas
  
Sínodo, un resultado de la Gracia
28 - 10 - 2015 - SINODOS - 2014-2015

A pesar de las presiones externas, de las operaciones dirigidas a convertir el Sínodo en una plataforma mundana de la sociedad desvinculada, con una acción especialmente intensa del lobby del homosexualismo político, el resultado señala la fuerza de la Gracia de Dios ante la que fracasan las maniobras seculares. Siete rasgos pueden destacarse en relación al texto final y la forma como se ha logrado.

Participación. Se han producido nada menos que 1.355 enmiendas y 248 observaciones, que se han trabajado en debates y votaciones consiguiendo a pesar de su número un buen texto final.

Universalidad. ¿Quién puede reunir durante tres semanas a dirigentes procedentes de todas las partes del mundo para trabajar conjuntamente sin convertirlo en un inmenso guirigay de declaraciones y contradeclaraciones, de egos, protagonismos y facciones, que es lo que desde fuera se ha intentado? Esta universalidad la han proporcionado los obispos de todo el planeta, demostrando una vez más que la Iglesia es la única institución humana realmente global.

Democracia. La franqueza y exhaustividad de los debates, tanto en régimen general, como bajo la fórmula de circoli minori, 13 en total, que agrupa a obispos de la misma comunidad lingüística, seguidos de votaciones exhaustivas, constituyen un ejemplo de ese medio que no fin, la democracia, del que todos hablan y pocos practican, la democracia en serio.

Voluntad constructiva y de consenso. El trabajo, la voluntad de escuchar y dialogar para edificar y, por qué no decirlo, la inteligencia, han llevado a un texto integrador de las distintas y en algún caso encontradas posiciones, que a pesar de sus diferencias -la Iglesia siempre ha estado viva; por tanto nunca ha sido una balsa de aceite- encuentran el denominador común en fidelidad los acuerdos fundamentales, en la práctica de una tradición en la que todos se reconocen.

Respeto mutuo y hacia los demás. Todo el lenguaje del documento es constructivo y conciliador. Dice lo que debe decir, por ejemplo en relación a las parejas homosexuales, sin el menor asomo de descalificación. Los que “están fuera” tienen la misma consideración que los que están dentro. La mundanidad y sus instituciones, partidos, lobby, asociaciones, podrían aprender de este estilo y contribuirían a una humanidad mejor. Para defender lo propio no hace falta menospreciar al que piensa distinto.

Un gran acuerdo final. La gran mayoría de los 94 puntos del texto han sido aprobados por votaciones favorables muy amplias, y los pocos que menos han adhesiones han conseguido han sido acordados por mayorías del 66% de los votos, el mínimo imprescindible. Otro buen ejemplo para las instituciones seculares.

Primacía del Papa. Los acuerdos del Sínodo son interpretados y aplicados por el sucesor de Pedro. Es fantástico que esta característica esencial de la Iglesia, tan vituperada por los “externos” interesados en dar lecciones de pluralidad y democracia, sea aplaudida ahora. Ahora sí vale la pena la autoridad papal (agarrándose al último espejismo de que el Papa cambie los acuerdos para satisfacer a la mundanidad). Pues siempre ha valido lo mismo. No es la subjetividad y el interés de parte lo que puede negar o confirmar la primacía del Papa.

Desde fuera han intentado convertir un Sínodo sobre la familia en un festival gay, con el aditamento de la comunión de los divorciados vueltos a casar, donde medios y personas que no creen para nada en los sacramentos han manifestado interés y beligerancia en esta cuestión. Una muestra más de que la Iglesia importa, porque si fuera marginal no intentarían maniobrar para cambiarla. Una vez más y como es propio de la cultura de la desvinculación, han intentado juzgar lo que es normal a través de lo excepcional. Naturalmente no lo han conseguido y la reunión se ha centrado en la familia humana, y la concepción antropológica, teológica y pastoral de la Iglesia. Porque el cuerpo fundamental del Sínodo trataba del desafío que significa un compromiso definitivo como proyecto de Dios para la persona, la ayuda efectiva al matrimonio, la educación de los hijos, y las familias rotas.

El Sínodo también ha abordado la apertura a la vida de los esposos, el respeto al ser humano concebido, la descalificación del aborto, el rechazo a las intervenciones de los estados a favor de la anticoncepción, la esterilización y el aborto. El derecho a una muerte humana y natural sin encarnizamiento terapéutico ni eutanasia.

Algunos medios intentan ocultar el fracaso de sus preferencias frustradas, promoviendo una Iglesia que corre detrás del mundo, presentando una división entre la mayoría sinodal y el Papa. En este empeño y una vez más la televisión pública catalana, TV3, y El País se han esforzado en esta línea; al menos los segundos lo hacen con su dinero, mientras que aquella televisión, que ofende y manipula, lo hace gracias al dinero de todos los catalanes.

La Iglesia semper reformanda. Es así porque sería imposible mantener tal vigor y novedad después de 2.000 años de historia. Reforma perenne sí, pero a partir de ella misma. Quienes quieren que esta cultura que solo llena una pequeña parte del mundo, que además está en declive, le marque el paso, debería ser más humildes, porque quien ha visto levantarse y caer imperios e ideologías, que parecían invencibles, culturas hegemónicas que han quedado en nada, y que los continuará contemplando en su auge y final, no pueden dejarse llevar por la coyuntura de la historia humana, sino que se guía por sus raíces. Comprender al mundo, dialogar con él, pero siempre desde la propia identidad y para el mismo fin para el que hemos sido mandatados: anunciar la Buena Nueva.(FORUM LIBERTAS)