El pastor Anthony Evans explica que con su decisión buscan exhortar a los hermanos y hermanas de la PCUSA a arrepentirse y restaurar la comunión. Y añade que «la NCBI y sus miembros se basan simplemte en la palabra de Dios y en la mente de Cristo»
«Ninguna iglesia tiene el derecho de cambiar la Palabra de Dios», dijo Evans. «Al votar la redifinición del matrimonio la PCUSA pierde automáticamente la gracia salvadora de Cristo».
Piden al resto de cristianos que hagan lo mismo
La NBCI pide también al resto de la Cristiandad que haga lo mismo y rompa relaciones con quienes «han cambiado la Palabra de Dios».
El antecedente inmediato de la rebelión
La comunión eclesial, la mayor denominación presbiteriana, hizo el anuncio después de que la mayoría de sus 171 órganos de gobierno regionales aprobaron los cambios.
La constitución revisada de esa iglesia sostiene ahora que el matrimonio es «un compromiso entre dos personas, tradicionalmente un hombre y una mujer». Ese texto sustituye uno anterior en el que se mencionaba que el matrimonio era la unión «sólo de un hombre y una mujer».
En el 2011 la misma comunión eclesial aprobó la ordenación de sacerdotes abiertamente gays o lesbianas, y el año pasado había permitido a sus ministros presidir bodas gay en los estados donde son reconocidos legalmente, aunque el Lay Committee, de tendencia evangélica conservadora, calificó la decisión en conformidad con la enseñanza bíblica, al tildarla de abominación.
Según informa Pablo Ginés en Religión en Libertad, la comunión eclesial presbiteriana en EE.UU ha perdido una tercera parte de sus fieles en lo que llevamos de siglo XXI.
(INFOCATOLICA)