Tan fuertes son los ataques de la curia romana en contra de la revolución de las costumbres en la Iglesia impulsadas por el Pontífice, que Avvenire, tradicionalmente muy cauteloso en tomar una posición en las silenciosas guerras políticas vaticanas, sintió la necesidad de publicar un editorial firmado por el director, Marco Tarquinio, con un título que ya es toda una toma de posición: "El barco de Pedro, los que reman en contra y la confianza en Francisco". Tratándose del diario de los obispos italianos, más explícito no podía ser.

¿Que pasó? El 24 de diciembre, en el Corriere della Sera, uno de los diarios italianos más influyentes, el escritor Vittorio Messori publicó un artículo muy agresivo contra Francisco, en el que sostuvo que se trataba de "un papa impredecible, tan impredecible que está perdiendo la confianza de algunos de los cardenales que fueron sus electores".

Para Messori, "esta imprevisibilidad molesta al católico medio". Por cómo funcionan los equilibrios en la prensa italiana, el hecho de que el Corriere della Sera haya publicado un artículo de este tenor en vísperas de la Navidad fue interpretado como un mensaje de que parte de la curia y de los conservadores en el Vaticano están decididos a entrar en guerra contra Bergoglio.

El director del Avvenire expresa su desconcierto porque un autor prestigioso como Messori, y un diario tan influyente como el Corriere "se hayan volcado a la tarea de dar voz provocadora a un presunto ‘católico medio', que habría perdido la tranquilidad por las palabras y los gestos del Papa".

Para Tarquinio, todo no es más que una minúscula intención de objetar "al papa de la paz como misión que se hermana con todo perseguido y en especial con los que lo son por la fe en Jesús; al papa del diálogo sin exclusiones para alimentar y saciar el hambre y la sed de verdad".

Desde la Iglesia de base llegó una ola de cartas de apoyo a Francisco. Según el coordinador del movimiento de católicos de base Nosotros Somos Iglesia, Vittorio Bellavite, "esta decisión de tomar una posición en defensa de Francisco tiene que ver con la situación general en la Iglesia y la cada vez más extensa y silenciosa hostilidad en contra del Papa".

Pero mucho más allá fue Paolo Farinella, un párroco muy popular de una iglesia del puerto de Génova, para quien el artículo de Messori "es un ataque frontal contra el Papa. Es una verdadera declaración de guerra, una amenaza mafiosa. Es como decir: el Papa es peligroso, es tiempo de que vuelva a hacer de Sumo Pontífice y deje a la curia la tarea de gobernar la Iglesia".

Farinella identifica como "mandantes" del artículo a los cardenales Muller, Burke, Brandmuller, Caffara y De Paolis, referentes del sector más conservador de la Iglesia.(RELIGION DIGITAL)