"Influida por Francisco, la Iglesia Católica se abre por primera vez a sodomitas, invertidos y demás enfermos de homosexualismo. La decisión del Sumo Pontífice argentino de tolerar a afeminados, depravados tragaleches, pone fin a siglos de discriminación y condena moral para dar inicio a una era 'manfloro friendly'. ¿Nace el movimiento de sacerdotes por el tercer sexo? ¿Será Bergoglio el 'Papa de los culorrotos?", se lee en la tapa.

El Arzobispo de Tucumán, Monseñor Alfredo Zecca, se pronunció al respecto y consideró "una falta de respeto absolutamente inadmisible. Es una injuria imperdonable a la figura del Santo Padre".

Además, dijo que la revista se basa en argumentos falsos. "Lo que se pretende decir es falso porque la iglesia nunca ha discriminado la homosexualidad. Remitiéndome simplemente a palabras que el mismo Santo Padre ha dicho en diversas oportunidades, en primer lugar él dijo en un momento '¿Quién soy yo para condenar a un homosexual?'", opinó el prelado.

Señaló que "si uno va al Catecismo de la Iglesia Católica hay una clarísima distinción entre las personas, la condición homosexual y los actos homosexuales. Lo que la Iglesia no acepta son los actos homosexuales porque son contrarios a la naturaleza", aclaró.

Zecca sostuvo que "estamos en un momento donde está reinando una filosofía que se llama Constructivismo, que quiere decir una inmensa mentira. Dice que la realidad y la verdad es algo que se construye. La realidad no es algo que se construye y la verdad es algo se descubre no se construye".

A su vez justificó que "cuando uno deja este concepto de Ley Natural, de derecho natural o pierde el respeto por la naturaleza, surgen un montón de consecuencias que hemos visto como ser el matrimonio igualitario o una serie de cosas que son verdaderos disparates jurídicos, que son inventos que sólo traen problemas por haber dejado la realidad que está marcando la naturaleza".

Asimismo, argumentó que "la naturaleza dice que hay hombres y mujeres, por lo tanto no le demos vuelta a la ideología de género porque es una ideología falsa. Una cosa es lo que el Papa ha llamado más de una vez el `lobby gay´, y otra cosa, es la condición de una persona que puede ser homosexual y que es absolutamente respetable y que la Iglesia nunca jamás lo ha discriminado".

Por último, el arzobispo de Tucumán consideró que lo que se está haciendo es "crear una polémica sobre una base de mentira y faltar absolutamente el respeto e injuriar al Santo Padre para lo cual no tiene ningún derecho. Es una cosa que no se puede aceptar de ningún modo".(VALORES RELIGIOSOS)