La delegación de obispos de EEUU está presidida por el presidente del Comité sobre Migración, Mons. Eusebio Elizondo y por el Obispo Anthony Taylor de Little Rock, Arkansas. La reunión anual estudiará además, las alternativas que pueden adoptarse para proteger a los menores tanto en sus países de origen, como a lo largo de la ruta migratoria, en donde la existencia de pandillas pone en serio riesgo su incolumnidad.

“Está claro que la violencia perpetrada por las pandillas y el crimen organizado en partes de Centroamérica es un factor que contribuye al amplio número de menores que emigran,” dijo Monseñor Elizondo. “Deben adoptarse medidas para proteger a estos niños y asegurar su seguridad en sus comunidades”.

En noviembre, una delegación del Comité sobre Migración de USCCB viajó a Centroamérica para observar temas en relación a la migración de menores y elaboró un informe sobre el tema: “Misión para América Central : migración de niños solitarios hacia Estados Unidos” y diversas recomendaciones.

“A largo plazo, el gobierno estadounidense deberá trabajar con los Gobiernos en la región para aumentar mecanismos de protección para estos jóvenes, quienes constantemente viven en temor y son desprovistos de oportunidades de educación y empleo”, dijo el Obispo Elizondo. “De todos modos este no es simplemente un tema de migración -concluyó- pero también tiene que ver con la política exterior que debe asistir a estos países para que protejan a sus ciudadanos, especialmente a los más vulnerables”.(ZENIT)