Para la mayoría de los alemanes, la religión no juega ningún papel personal. Para el 61% de ellos no es «importante» o «absolutamente nada importante», según el estudio representativo «Fe - Sostenibilidad - Justicia». Así lo ha revelado hoy la Fundación responsable del Diálogo por la Paz en Lindau, que encargó una encuesta al instituto de estudios de opinión YouGov para que examinara las actitudes de los alemanes ante las cuestiones de sostenibilidad y justicia global; también se trató el tema de la religión y la fe. El 33% de los alemanes dijo que la religión era «importante» o «muy importante» para ellos, según el informe. El 30% se declara «devoto» o «muy devoto», el 35% «nada devoto». La proporción de personas que se describen a sí mismas como «nada religiosas» es particularmente alta en los estados del este (56%)«, dijo la fundación. «Las regiones con más personas que se describen como creyentes o muy creyentes son el Sur (35%) y el Oeste (32%). En el Este, el 21% de las personas se describen como (muy) devotas». Los jóvenes de 18 a 29 años son los que menos valoran la importancia de la religión en sus vidas. «Al comparar los grupos de edad, la proporción de quienes no expresaron su opinión en la encuesta es especialmente alta entre ellos (15% de «no sabe/no contesta», frente al 5% de los que tienen entre 30 y 54 años, y el 3% de los mayores de 55).« Además, este grupo de edad tiene el porcentaje más alto de quienes consideran la religión absolutamente nada importante (53%)». La fe no cambia en la pandemia Para la mayoría de los alemanes devotos (75%), su fe no ha cambiado en la pandemia, según la encuesta. Sin embargo un 12% de los jóvenes alemanes dijeron que su fe se había fortalecido durante la pandemia, mientras que en otros grupos de edad el porcentaje no supera el 7% Sólo el 12% de los encuestados piensa que las religiones tienden a contribuir positivamente a un mundo justo. «Es la cifra más baja de las instituciones encuestadas». Sólo el 27% de los encuestados ve a las religiones como actores sociales y políticos. Sus funciones son más bien la atención pastoral (69%), la oferta de orientación y apoyo (47%), el dar sentido a la vida (40%) y la solidaridad (38%). Las contribuciones sociopolíticas de las fundaciones y organizaciones no gubernamentales (33%), las Naciones Unidas (30%) y la Unión Europea (27%) fueron valoradas más positivamente.