Jordania reclama protección a Lugares Santos de Jerusalén
10 - 12 - 2020 - INTERRELIGIOSO - Otros
El embajador y portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Jordania, Daifallah al Fayez, condenó el acto delictivo y pidió a las autoridades israelÃes, como “potencia ocupanteâ€, que “respeten sus obligaciones en conformidad con la ley internacional, en relación con la protección de los lugares de culto». (Fuente: Verdadenlibertad)
El gobierno de Jordania reclama protección a Lugares Santos de Jerusalén tras ataque incendiario de un judÃo ultra contra la BasÃlica de la AgonÃa, al pie del Monte de los Olivos, donde prendió fuego algunos bancos que fueron rociados primero con lÃquido inflamable, el 4 de diciembre pasado. El embajador y portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Jordania, Daifallah al Fayez, condenó el acto delictivo y pidió a las autoridades israelÃes, como “potencia ocupanteâ€, que “respeten sus obligaciones en conformidad con la ley internacional, en relación con la protección de los lugares de culto».
Al Fayez reiteró el papel reclamado por el Monarca del Reino Hachemita de Jordania como “protector†de los Santos Lugares islámicos y cristianos de la Ciudad Santa. El ataque incendiario ocurrió mientras en la BasÃlica del Santo Sepulcro se realizaba la toma de posesión del arzobispo y nuevo Patriarca de Jerusalén de los Latinos, Pierbattista Pizzaballa, no muy lejos de allÃ, dentro de la BasÃlica de la AgonÃa. La policÃa israelÃ, tras ser convocada por los Padres Franciscanos de la Custodia de Tierra Santa que están a cargo de la BasÃlica, detuvo en Jerusalén al presunto autor del incendio, un judÃo ultra residente en Gilo, uno de los barrios construidos en los últimos años en los Territorios Palestinos entre Jerusalén y Belén. Pizzaballa presidió una concelebración eucarÃstica en la BasÃlica de la AgonÃa, como acto de reparación por el ultraje sufrido a ese lugar de culto, el domingo 6 de diciembre.
El Custodio de Tierra Santa, Francesco Patton, indicó que el ataque incendiario es un «acto condenable» que nos deja «sorprendidos y tristes» porque afecta «un lugar santo, un lugar de oración, un lugar de alto valor simbólico para todos los cristianos». Patton aseguró que la policÃa y las autoridades civiles tiene que hacer «justicia» en este caso «para evitar que tales actos se repitan», pero «no podemos reaccionar siguiendo el espÃritu del mundo; debemos hacerlo siguiendo el espÃritu del Evangelio». El de Getsemanà es sólo el último de una larga serie de ataques intimidatorios, algunos de los cuales fueron firmados con la leyenda ‘Price tag’ —el precio a pagar—, lema utilizado por los extremistas judÃos, que amenazan a los cristianos y musulmanes porque consideran que ellos les «quitaron sus tierras».
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