Los religiosos alemanes levantan sus alfombras. Una encuesta de la Conferencia de Superiores del país muestra cómo 1.412 personas sufrieron abusos sexuales a manos de frailes y monjas durante décadas. 654 religiosos fueron acusados de abusos, que se dieron en un 80% de los casos en congregaciones masculinas, y un 20% entre la vida religiosa femenina.

Unas cifras que muestran un horror sistemático, pero también la voluntad de abrir puertas y ventanas a la verdad. Un paso adelante de los religiosos alemanes, que bien habría de seguir la Iglesia española. Y que ha podido llegar tarde, pues el 79,8% de los presuntos abusadores ya han fallecido.

Depredadores sistemáticos
Los resultados del informe sobre abusos sexuales en la vida religiosa fue presentado este miércoles en Bonn. En el mismo han participado tres cuartas partes de las 392 comunidades religiosas alemanas. Un tercio de las respuestas confirmaron las acusaciones de abusos. En medio centenar de comunidades hubo menos de cinco denuncias, en unas 20 se produjeron más de diez.... y en algunas se dieron más de un centenar, lo que hace suponer la existencia de depredadores sistemáticos en los centros religiosas.
"Sí, hermanos y hermanas de nuestras comunidades han cometido abusos sexuales", subrayó la presidenta del DOK, la hermana Katharina Kluitmann, quien admitió la existencia de errores a la hora de lidiar con los abusos, que en algunos casos se remontan a los años 50.

De acuerdo con los resultados de la encuesta, existen conflictos entre las personas presuntamente afectadas y las comunidades, especialmente en lo referente al pago de indemnizaciones. Los religiosos, eso sí, se han comprometido a reconocer a las víctimas con un pago de entre 25.000 y 30.000 euros.