Esto asegura un estudio realizado en Gran Bretaña por Savanta ComRes, sobre cómo el confinamiento afecta la vida espiritual y de oración en las personas.
De acuerdo con la investigación, 2.6 millones de británicos han rezado por primera vez, y 5 millones se han conectado por primera vez a las transmisiones virtuales o televisivas de las misas y predicaciones.
La pesquisa se realizó con una muestra representativa de adultos británicos –entrevistando a 2.100 personas– entre el 24 y 27 de abril, luego de que se disparó en el territorio la cifra de muertos por coronavirus, superando los 2o mil.
El sondeo, que involucró a todas las confesiones religiosas, arrojó varios datos interesantes.
No rezaban, ahora sí
Uno de ellos es justamente el hecho que personas que nunca habían rezado, comenzaron a hacerlo ante la emergencia del Covid-19.
De acuerdo con el sondeo, en relación a 52 millones de adultos, el 5% son personas que no solían rezan, y no se manifestaban interesados en los temas espirituales, pero con el confinamiento han comenzado a rezar y a prestar más atención a la fe.
A esto se le suma que un 9% se ha unido, sin haberlo hecho antes, a los servicios religiosos que se ofrecen a través de los medios de comunicación.
Rezan, sobre todo, por la familia
La encuesta también especifica cuáles son las intenciones por las que más están rezando los británicos, siendo la familia la principal con un 53%.
También piden por los amigos y para dar gracias a Dios –cada una de éstas representando el 34%–; un 28% reza por las necesidades propias y para tener un mejor trato con Dios.
Asímismo, oran por los servicios sanitarios (27%), por los enfermos de Covid-19 (20%), por la respuesta que debe dar el gobierno a la pandemia (18%), para pedir perdón a Dios y poder confesar los pecados (17%), por el medio ambiente (15%), por la respuesta de los demás países ante el coronavirus (15%), por un trabajo o necesidades económicas (9%), además de otras intenciones.
La oración es importante en tiempo de dificultad
La investigación fue encargada por la ONG Cristiana Tearfund, institución cristiana británica al servicio de comunidades pobres, con el objeto de confirmar cómo en tiempos difíciles, la oración es importante.
Al respecto, ha comentado Ruth Valero, quien hace parte de la ONG:
“Da ánimos ver la cantidad de gente que en el Reino Unido está rezando durante esta época dura. Creo que la investigación demuestra que la oración es más común de lo que muchos podrían pensar”.
