El presidente del Global Council of Indian Christians (GCIC), Sajan George, denunció la ofensa perpetrada por extremistas hindúes del 'Antarrashtriya Hindu Parishad', quienes colocaron la imagen de un tridente -símbolo del fundamentalismo hindú- delante de una cruz ubicada en lo alto de una colina en Kerala, donde los fieles locales realizan el recorrido de las 14 estaciones del Vía Crucis, el sábado 15 de junio pasado.

Los atacantes, que acusaron a la iglesia de Saint Mary de pretender apropiarse de terrenos del Estado, realizaron una marcha contra las estaciones del Vía Crucis. "La cruz fue instalada en 1954, cuando el terreno de Panchalimedu pertenecía a dos familias de la alta sociedad. En los últimos 65 años, los parroquianos siempre han escalado la colina en oración, mientras recordaban el Vía Crucis", indicó James, vicario de la iglesia de Saint Mary. La administración del distrito retiró el tridente del lugar, mientras que los responsables del templo quitaron la cruz como supuesto "gesto de pacificación", mientras que las 14 estaciones del Vía Crucis permanecen.

"Los elementos radicales de las brigadas azafranadas -se refiere al color azafrán que identifica al nacionalismo hindú- quieren destruir, con agresividad, la paz entre las comunidades y la tolerancia en el Estado meridional de Kerala. Cualquier disputa territorial debe ser resuelta por un tribunal, y no por vándalos que enardecen a las multitudes para destruir y crear un clima de miedo", alertó George.