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Los cristianos, cada vez más asfixiados en Israel
24 - 01 - 2019 - EMERGENCIA ANTROPOLOGICA - Otros

Viven una situación de presión que está reduciendo notablemente las comunidades cristianas en la zona. (Fuente: Forumlibertas)

El cristianismo es la religión más perseguida el mundo según constatan numerosos reportes sobre la persecución religiosa en el mundo. Sin embargo, resulta especialmente crítico cuando el lugar donde los cristianos están sufriendo una marginación sistemática es, precisamente, en la tierra de Jesucristo, en Israel.

Los cristianos viven allí una situación de presión que está reduciendo notablemente las comunidades cristianas en la zona. El gobierno desarrolla acciones contra esta comunidades, que son oprimidas sistemáticamente. Esto es lo que ha constatado una delegación de 15 obispos católicos que han visitado recientemente a estas comunidades, y que han observado las profundas dificultades por las que pasan estas comunidades. Lo mismo sucede, según esta delegación, con otras confesiones minoritarias como los árabes palestinos y los migrantes.

“La miseria de la ocupación en Palestina se ha visto agravada por los severos recortes de la financiación humanitaria por parte del gobierno de los Estados Unidos”, han afirmado el grupo de obispos católicos provenientes de diferentes partes del mundo.

Los cristianos perseguidos de Medio Oriente
En 2018 ha habido una denuncia de la progresiva desaparición de los cristianos en Oriente Medio debido a la persecución ejercida contra estas minorías. El presidente del Pontificio Consejo para la Promoción de la Unidad de los Cristianos, Kurt Koch, aseveraba en julio que el porcentaje de cristianos en la zona había disminuido drásticamente en el transcurso de un siglo.

En el Encuentro del Papa Francisco con los Jefes de Iglesias y Comunidades cristianas de Medio Oriente que tuvo lugar en julio, los líderes religiosos exhibieron fuertes relaciones ecuménicas, especialmente entre ortodoxos y católicos. El encuentro tuvo lugar en Bari (sur de Italia), ciudad que custodia las reliquias de San Nicolás y que es considerada la ventana hacia el Oriente, se reunieron diez líderes religiosos entre católicos, ortodoxos y luteranos, entre los que se encontraba el Papa Francisco, el patriarca ecuménico de Constantinopla Bartolomé, el metropolita Hilarion en representación del patriarca ruso Cirilo, Tawadros II en representación de las Iglesias orientales ortodoxas, el Papa copto de Alejandría Aphrem II, y el patriarca sirio-ortodoxo de Antioquía, el obispo Hovakim, entre otros.

Los líderes oraron por los cristianos perseguidos en Oriente Medio y expresaron su temor de que se extinga la presencia de cristianos en Oriente Medio, desfigurando “el mismo rostro de la región”, según afirmaron en su declaración conjunta. Según los datos del Foro Internacional Cristiano divulgados a finales del 2017, el riesgo de que eso suceda es elevado debido a la situación de violencia en la zona y la radicalización del Islam, como principales razones. En los últimos 10 años, el número de los cristianos en Oriente Medio ha caído un 80%. En 1910, el número de estos representaba el 13,6% de la población de esa región y para el 2025 se calcula que será sólo del 3%.

Asimismo, las principales Iglesias cristianas en Jerusalén (católica, greco-ortodoxa y armenia) cerraron el 25 de febrero y durante tres días el templo que cobija el Santo Sepulcro, el lugar más sagrado del cristianismo, en una medida sin precedentes en protesta por medidas legales y fiscales de Israel que consideraron un ataque contra la presencia cristiana en Tierra Santa. Las autoridades israelíes, tanto nacionales como municipales, habían decidido nuevas disposiciones municipales para obligar a las Iglesias a pagar el “arnona” (impuesto sobre bienes inmuebles) del que estaban exentas históricamente, y una propuesta de ley para expropiar tierras en Jerusalén vendidas por las iglesias desde 2010. Finalmente las autoridades de Israel congelaron las medidas tras la presión ejercida por las Iglesias.