Encarecida petición del cardenal Santos Abril a los gobiernos europeos a que no dejen morir "a la pobre gente" que llega al continente "en circunstancias muy difíciles". Al oficiar este miércoles la misa patronal de su pueblo, Alfambra, el purpurado turolense -uno de los hombres claves del Papa Francisco- ha pedido que los políticos hagan algo para asegurar un "trato humanitario" a los inmigrantes así como para "combatir las mafias" que se aprovechan de ellos.

El cardenal Abril se ha mostrado escandalizado en su sermón por las situaciones de esclavitud en el mundo que se dan "hoy mismo, no hace veinte siglos", de acuerdo con lo publicado por el Heraldo.

Especialmente lamentables en este sentido, para el prelado, son las situaciones que se viven en la India, en China, o en Mauritania, país este último donde entre un 10% y un 15% de los ciudadanos es explotado y las mujeres esclavas, particularmente, son "tratadas de forma indigna" y "violadas" por sus dueños. Estas mujeres son entregadas como "un vaso de vino" por sus propietarios, ha denunciado el purpurado.

El cardenal Abril ha calificado todas estas situaciones de opresión como "intolerables" y, aunque ha denunciado que los "primeros responsables" de estas injusticias "son los gobiernos", también ha afirmado que está en mano de todos rebelarse contra ellas y "hacer algo" para erradicarlas.

A este fin, el presidente de la Comisión vaticana que vigila el Instituto para las Obras de Religión -el conocido como "banco vaticano"- ha dicho que es necesaria "una revolución de las mentalidades" entre la población acerca de las injusticias que se sufren en el mundo, y para ello puede servir la "resistencia pacífica, al estilo de Gandhi".

El cardenal Abril asimismo ha revelado que ha hablado con el pontífice en varias ocasiones sobre estas situaciones "que no se pueden tolerar", y frente a las cuales es de vital importancia que todos los ciudadanos trabajen por un mundo "de paz, justicia, solidaridad y bien".